Ritual cristiano 5° (CONSAGRACIÓN:
ORDEN SACERDOTAL)
Esta consagración la
pueden recibir aquellas personas que ya han recibido la orden sacerdotal o
aquellas personas que han demostrado que están dispuestos a dedicar su vida a
la cristiandad. Asimismo, deben demostrar ser hombres virtuosos sin que esto
menoscabe su paz interior (Sabiendo responderse el: ¿Quién soy?). Esta
consagración solo la puede otorgar alguien que posea la orden sacerdotal o el
5° de este ritual. Los requisitos son: una biblia, agua y aceite benditos, una
alfombra cuadrada azul, agua tibia para beber y dos testigos que posean este
grado.
Diácono: hermanos míos, pongámonos todos de pie y de cara al
espíritu (hacia el Este), hagamos una breve pausa para prepararnos a recibir
este momento misericordioso. Calmemos nuestra mente y nuestro cuerpo y
abramos el corazón a Cristo. (Se
hace un minuto de silencio).
Diácono: en nombre de Cristo
y con la gracia de San Juan
evangelista, abrimos este sacramento para que hoy se cumpla la Virtud
y podamos defender la palabra. (3†, Jehová-Yeshúa-María, AMéN) ¡Santo, Santo,
Santo!
Diácono: hermano, antes de continuar con el ritual de la
ordenación te pregunto: ¿Deseas ser más voluntarioso? (El hermano debe
contestar afirmativamente para continuar con el ritual).
Diácono: hermano, si es así, escucha la palabra de Dios:
(Apocalipsis 1:8-18) …“8 "Yo soy el Alfa y la
Omega", dice el Señor Dios, "el que es, y que era y
que ha de venir, el Todopoderoso." 9 Yo Juan, vuestro hermano y
copartícipe en la tribulación y en el reino y en la perseverancia en Jesús,
estaba en la isla llamada Patmos por causa de la palabra de Dios y del
testimonio de Jesús. 10 Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor
y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta, 11 que decía:
"Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias: a Efeso,
a Esmirna, a Pérgamo, a Tiatira, a Sardis, a Filadelfia y a Laodicea." 12
Di vuelta para ver la voz que hablaba conmigo. Y habiéndome vuelto, vi
siete candeleros de oro, 13 y en medio de los candeleros vi a uno
semejante al Hijo del Hombre, vestido con una vestidura que le llegaba hasta los
pies y tenía el pecho ceñido con un cinto de oro. 14 Su cabeza y sus
cabellos eran blancos como la lana blanca, como la nieve, y sus ojos eran como
llama de fuego. 15 Sus pies eran semejantes al bronce bruñido,
ardiente como en un horno. Su voz era como el estruendo de muchas aguas. 16
Tenía en su mano derecha siete estrellas, y de su boca salía una espada
aguda de dos filos. Su rostro era como el sol cuando resplandece en su fuerza. 17
Cuando le vi, caí como muerto a sus pies. (En este momento se toma de sorpresa
al hermano y se le acuesta horizontalmente sobre el piso y boca abajo,
indicándole, únicamente, que no se debe levantar, además se le coloca una
piedrecita blanca en su mano derecha, luego de esto se continúa leyendo…). Y puso sobre mí su mano derecha y me dijo:
"No temas. Yo soy el primero y el último, 18 el que vive.
Estuve muerto, y he aquí que vivo por los siglos de los siglos. Y tengo las
llaves de la muerte y del Hades.”…
(Apocalipsis 4:1-8) …“Después
de esto miré, y he aquí una puerta abierta en el cielo. La primera voz que oí
era como de trompeta que hablaba conmigo diciendo: "¡Sube acá, y te
mostraré las cosas que han de acontecer después de éstas!" 2 De
inmediato estuve en el Espíritu; y he aquí un trono estaba puesto en el cielo,
y sobre el trono uno sentado. 3 Y el que estaba sentado era
semejante a una piedra de jaspe y de cornalina, y alrededor del trono había un
arco iris semejante al aspecto de la esmeralda. 4 También alrededor
del trono había veinticuatro tronos, y sobre los tronos vi a veinticuatro
ancianos sentados, vestidos de vestiduras blancas, con coronas de oro sobre sus
cabezas. 5 Del trono salen relámpagos y truenos y voces. Y delante
del trono arden siete antorchas de fuego, las cuales son los siete Espíritus de
Dios. 6 Y delante del trono hay como un mar de vidrio, semejante al
cristal. Junto al trono, y alrededor del mismo, hay cuatro seres vivientes
llenos de ojos por delante y por detrás. 7 El primer ser viviente es
semejante a un león, y el segundo ser viviente es semejante a un becerro, y el
tercer ser viviente tiene cara como de hombre, y el cuarto ser viviente es
semejante a un águila volando. 8 Y cada uno de los cuatro seres
vivientes tiene seis alas, y alrededor y por dentro están llenos de ojos. Ni de
día ni de noche cesan de decir: "¡Santo, Santo, Santo es el Señor Dios
Todopoderoso, que era y que es y que ha de venir!”… (Se hace una
pausa para reflexionar).
(Apocalipsis 7:1-4) …“Después
de esto, vi a cuatro ángeles que estaban de pie sobre los cuatro puntos cardinales
de la tierra, y que detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no
soplase viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol. 2
Y vi que otro ángel, subiendo del oriente, tenía el sello del Dios vivo.
Y llamó a gran voz a los cuatro ángeles a quienes les fue dado hacer daño a la
tierra y al mar, 3 diciendo: "¡No hagáis daño a la tierra, ni
al mar, ni a los árboles, hasta que marquemos con un sello la frente de los
siervos de nuestro Dios!" 4 Oí el número de los sellados:
144.000 sellados de todas las tribus de los hijos de Israel.”… (Se
hace una pausa para reflexionar).
(Apocalipsis 8:1-9:6) …“Cuando
él abrió el séptimo sello, se hizo silencio en el cielo como por media hora. 2
Y vi a los siete ángeles que estaban delante de Dios, y les fueron dadas
siete trompetas. 3 Y otro ángel vino y se puso de pie delante del
altar. Tenía un incensario de oro, y le fue dado mucho incienso para que lo
añadiese a las oraciones de todos los santos sobre el altar de oro, que estaba
delante del trono. 4 Y el humo del incienso con las oraciones de los
santos subió de la mano del ángel en presencia de Dios. 5 Y el ángel
tomó el incensario, lo llenó con fuego del altar y lo arrojó sobre la tierra. Y
se produjeron truenos y estruendos y relámpagos y un terremoto. 6 Los
siete ángeles que tenían las siete trompetas se dispusieron a tocarlas. 7 El
primero tocó la trompeta. Y se produjo granizo y fuego mezclados con sangre, y
fueron arrojados sobre la tierra. Y la tercera parte de la tierra fue quemada,
y la tercera parte de los árboles fue quemada, y toda la hierba verde fue
quemada. 8 El segundo ángel tocó la trompeta. Y algo como un gran
monte ardiendo con fuego fue lanzado al mar. Y la tercera parte del mar se
convirtió en sangre; 9 y murió la tercera parte de las criaturas
vivientes que estaban en el mar, y la tercera parte de los barcos fue
destruida. 10 El tercer ángel tocó la trompeta. Y cayó del cielo una
gran estrella, ardiendo como una antorcha; y cayó sobre la tercera parte de los
ríos y sobre las fuentes de agua. 11 El nombre de la estrella es
Ajenjo. Y la tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo, y muchos
hombres murieron por las aguas, porque fueron hechas amargas. 12 El
cuarto ángel tocó la trompeta. Y fue herida la tercera parte del sol, la
tercera parte de la luna y la tercera parte de las estrellas, de manera que se
oscureció la tercera parte de ellos, y no alumbraba el día durante una tercera
parte, y también la noche de la misma manera. 13 Miré y oí volar un
águila por en medio del cielo, diciendo a gran voz: "¡Ay, ay, ay de los
que habitan en la tierra, por razón de los demás toques de trompeta que los
tres ángeles aún han de tocar!". El quinto ángel tocó la trompeta. Y vi
que una estrella había caído del cielo a la tierra, y le fue dada la llave del
pozo del abismo. 2 Y abrió el pozo del abismo, y subió humo del pozo
como el humo de un gran horno; y fue oscurecido el sol y también el aire por el
humo del pozo. 3 Y del humo salieron langostas sobre la tierra, y
les fue dado poder como tienen poder los escorpiones de la tierra. 4 Y
se les dijo que no hiciesen daño a la hierba de la tierra ni a ninguna cosa
verde, ni a ningún árbol, sino solamente a los hombres que no tienen el sello
de Dios en sus frentes. 5 Se les mandó que no los matasen, sino que
fuesen atormentados por cinco meses. Su tormento era como el tormento del
escorpión cuando pica al hombre. 6 En aquellos días los hombres
buscarán la muerte, pero de ninguna manera la hallarán. Anhelarán morir, y la
muerte huirá de ellos.”… (Se hace una pausa para reflexionar).
(Apocalipsis 10:1-4) …“Vi a
otro ángel poderoso que descendía del cielo envuelto en una nube, y el arco
iris estaba sobre su cabeza. Su rostro era como el sol, y sus piernas como
columnas de fuego, 2 y tenía en su mano un librito abierto. Puso su
pie derecho sobre el mar y su pie izquierdo sobre la tierra, 3 y
gritó a gran voz, como cuando ruge el león. Cuando gritó, los siete truenos
emitieron sus voces. 4 Cuando los siete truenos hablaron, yo estaba
por escribir, pero oí una voz del cielo que decía: "Sella las cosas que
los siete truenos hablaron; no las escribas.”… (Se hace una pausa
para reflexionar).
(Apocalipsis 11:1-5) …“Entonces me fue dada una caña, semejante a
una vara de medir, y se me dijo: "Levántate y mide el templo de Dios y el
altar, y a los que en él adoran.
Diácono: hermano mío, yo te reconozco como un hombre que
puede dar el ejemplo, y por ello, en
nombre de nuestro Señor Jesucristo y con la gracia de San Juan evangelista te
consagro con este grado. (El diax impx las mmanx sobre la cabx del herx). (En
este momento el Diácono le retira la piedrecita blanca de la mano y luego
levanta al hermano, que está en el suelo, tomándolo por la mano derecha y
untándole aceite bendito, mientras dice:
“Levántate y anda”, luego de esto se continúa leyendo…). 2
Y deja aparte el atrio de
afuera del templo. Y no lo midas, porque ha sido dado a los gentiles, y ellos
pisotearán la ciudad santa por cuarenta y dos meses. 3 Yo mandaré a
mis dos testigos, y ellos profetizarán por 1.260 días, vestidos de cilicio. 4
Ellos son los dos olivos y los dos candeleros que están delante del Dios
de la tierra. 5 Si alguien les quiere dañar, fuego sale de la boca
de ellos y devora a sus enemigos. Cuando alguien les quiera hacer daño, tiene
que morir de esta manera.”… (Se hace una pausa para reflexionar).
(Apocalipsis 12-13) …“Apareció en el
cielo una gran señal: una mujer vestida del sol y con la luna debajo de sus
pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas. 2 Y estando
encinta, gritaba con dolores de parto y sufría angustia por dar a luz. 3 Y
apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón rojo que tenía siete
cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas tenía siete diademas. 4 Su
cola arrastraba la tercera parte de las estrellas del cielo y las arrojó sobre
la tierra. El dragón se puso de pie delante de la mujer que estaba por dar a
luz, a fin de devorar a su hijo en cuanto le hubiera dado a luz. 5 Ella
dio a luz un hijo varón que ha de guiar todas las naciones con cetro de hierro.
Y su hijo fue arrebatado ante Dios y su trono. 6 Y la mujer huyó al
desierto, donde tenía un lugar que Dios había preparado, para ser alimentada
allí durante 1.260 días. 7 Estalló entonces una guerra en el cielo:
Miguel y sus ángeles pelearon contra el dragón. Y el dragón y sus ángeles
pelearon, 8 pero no prevalecieron, ni fue hallado más el lugar de
ellos en el cielo. 9 Y fue arrojado el gran dragón, la serpiente
antigua que se llama diablo y Satanás, el cual engaña a todo el mundo. Fue
arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados junto con él. 10 Oí
una gran voz en el cielo que decía: "¡Ahora ha llegado la salvación y el
poder y el reino de nuestro Dios, y la autoridad de su Cristo! Porque ha sido
arrojado el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba día y noche
delante de nuestro Dios. 11 Y ellos lo han vencido por causa de la
sangre del Cordero y de la palabra del testimonio de ellos, porque no amaron
sus vidas hasta la muerte. 12 Por esto, alegraos, oh cielos, y los
que habitáis en ellos. ¡Ay de la tierra y del mar! Porque el diablo ha
descendido a vosotros y tiene grande ira, sabiendo que le queda poco
tiempo." 13 Y cuando el dragón vio que había sido arrojado a la
tierra, persiguió a la mujer que había dado a luz al hijo varón. 14 Pero
le fueron dadas a la mujer dos alas de gran águila, para volar de la presencia
de la serpiente, al desierto, a su lugar donde recibe alimento por un tiempo, y
tiempos y la mitad de un tiempo. 15 Tras la mujer, la serpiente echó
de su boca agua como un río, para que ella fuese arrastrada por el torrente. 16
Pero la tierra ayudó a la mujer. Y la tierra abrió su boca y tragó por
completo el río que el dragón había echado de su boca. 17 Entonces
el dragón se enfureció contra la mujer, y se fue para hacer guerra contra los
demás descendientes de ella, quienes guardan los mandamientos de Dios y tienen
el testimonio de Jesucristo. 18 Y él se puso de pie sobre la arena
del mar. Y vi que subía del mar una bestia que tenía diez cuernos y siete cabezas.
Sobre sus cuernos tenía diez diademas, y sobre sus cabezas había un nombre de
blasfemia. 2 La bestia que vi era semejante a un leopardo; sus pies
eran como de oso, y su boca como la boca de león. Y el dragón le dio su poder y
su trono y grande autoridad. 3 Vi una de sus cabezas como herida de
muerte, pero su herida mortal se había sanado. Y toda la tierra se maravilló en
pos de la bestia, 4 y adoraron al dragón porque le había dado
autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia diciendo: "¿Quién es semejante
a la bestia, y quién puede combatir contra ella?" 5 Y a la
bestia le fue dada una boca que hablara insolencias y blasfemias, y le fue dada
autoridad para actuar por cuarenta y dos meses. 6 Y abrió su boca en
blasfemias contra Dios, para blasfemar contra su nombre y contra su
tabernáculo, es decir, contra los que tienen morada en el cielo. 7 Y
le fue permitido hacer guerra contra los santos y vencerlos. También le fue
dado poder sobre toda raza y pueblo y lengua y nación. 8 Y le
adorarán todos los habitantes sobre la tierra, cuyos nombres no están inscritos
en el libro de la vida del Cordero, quien fue inmolado desde la fundación del
mundo. 9 Si alguno tiene oído, oiga: 10 Si alguien lleva
en cautividad, es llevado en cautividad; si alguien mata a espada, tiene que
ser muerto a espada. ¡Aquí está la perseverancia y la fe de los santos! 11
Y vi otra bestia que subía de la tierra. Y tenía dos cuernos semejantes a
los de un cordero, y hablaba como un dragón. 12 Y ejerce toda la
autoridad de la primera bestia en presencia de ella, y hace que la tierra y sus
habitantes adoren a la primera bestia cuya herida mortal fue sanada. 13 Y
hace grandes señales, de tal manera que aun hace descender fuego del cielo a la
tierra delante de los hombres. 14 Y engaña a los habitantes de la
tierra a causa de las señales que se le concedió hacer en presencia de la
bestia, mandándoles a los habitantes de la tierra hacer una imagen en honor de
la bestia que tiene la herida de espada y que revivió. 15 También le
fue permitido dar aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen de la
bestia hablase e hiciera que fueran muertos todos los que no adoraran a la
imagen de la bestia. 16 Y ella hace que a todos, a pequeños y a
grandes, a ricos y a pobres, a libres y a esclavos, se les ponga una marca en
la mano derecha o en la frente, 17 y que nadie pueda comprar ni
vender, sino el que tenga la marca, es decir, el nombre de la bestia o el
número de su nombre. 18 Aquí hay sabiduría: El que tiene
entendimiento calcule el número de la bestia, porque es número de un hombre; y
su número es 666.”… (Se hace una pausa para reflexionar).
(Apocalipsis 16) …“Entonces oí una gran voz que desde el templo
decía a los siete ángeles: "Id y derramad las siete copas de la ira de
Dios sobre la tierra." 2 Fue el primer ángel y derramó su copa
sobre la tierra. Y se produjo una llaga dolorosa y maligna sobre los hombres
que tenían la marca de la bestia y los que adoraban su imagen. 3 El
segundo ángel derramó su copa sobre el mar. Y se convirtió en sangre como de
muerto. Y murió todo ser viviente que estaba en el mar. 4 El tercer
ángel derramó su copa sobre los ríos y sobre las fuentes de las aguas, y se
convirtieron en sangre. 5 Oí al ángel de las aguas decir:
"Justo eres tú que eres y que eras, el Santo, porque has juzgado estas
cosas. 6 Porque ellos derramaron la sangre de los santos y de los
profetas, tú también les has dado a beber sangre, pues se lo merecen." 7
Y oí al altar decir: "¡Ciertamente, oh Señor Dios Todopoderoso, tus
juicios son verdaderos y justos!" 8 El cuarto ángel derramó su
copa sobre el sol, y le fue dado quemar a los hombres con fuego. 9 Los
hombres fueron quemados con el intenso calor y blasfemaron el nombre del Dios
que tiene autoridad sobre estas plagas, pero no se arrepintieron para darle
gloria. 10 El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la
bestia, y su reino fue convertido en tinieblas. Se mordían las lenguas de dolor
11 y blasfemaron al Dios del cielo por sus dolores y sus llagas,
pero no se arrepintieron de sus obras. 12 El sexto ángel derramó su
copa sobre el gran río Éufrates, y sus aguas se secaron para que fuese
preparado el camino de los reyes del Oriente. 13 Vi salir de la boca
del dragón y de la boca de la bestia y de la boca del falso profeta, tres
espíritus impuros semejantes a ranas. 14 Pues son espíritus de
demonios que hacen señales, los cuales salen a los reyes de todo el mundo
habitado para congregarlos para la batalla del gran día del Dios Todopoderoso. 15
"He aquí, yo vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela y guarda
sus vestidos para que no ande desnudo y vean su vergüenza." 16 Y
los congregó en el lugar que se llama en hebreo Armagedón. 17 El
séptimo ángel derramó su copa por el aire. Y salió una gran voz del santuario
desde el trono, que decía: "¡Está hecho!" 18 Entonces se
produjeron relámpagos y estruendos y truenos, y hubo un gran terremoto. Tan
fuerte fue ese gran terremoto como jamás había acontecido desde que el hombre
existe sobre la tierra. 19 La gran ciudad se dividió en tres partes,
y las ciudades de las naciones cayeron. Y la gran Babilonia fue recordada
delante de Dios, para darle a ella de la copa del vino del furor de su ira. 20
Toda isla huyó, y las montañas no fueron halladas más. 21 Y
del cielo cayó sobre los hombres enorme granizo, como de un talento de peso. Y
los hombres blasfemaron a Dios por la plaga del granizo, porque la plaga era
grande en extremo.”… (Se hace una pausa para reflexionar).
(Apocalipsis 17:1-14) …“Vino
uno de los siete ángeles que tenían las siete copas y habló conmigo diciendo:
"Ven acá, y te mostraré la condenación de la gran ramera que está sentada
sobre muchas aguas. 2 Con ella fornicaron los reyes de la tierra, y
los que habitan en la tierra se embriagaron con el vino de su
fornicación." 3 Me llevó en el Espíritu al desierto. Y vi una
mujer sentada sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia y que
tenía siete cabezas y diez cuernos. 4 La mujer estaba vestida de
púrpura y escarlata, y estaba adornada con oro y piedras preciosas y perlas. En
su mano tenía una copa de oro llena de abominaciones y de las impurezas de su
inmoralidad. 5 En su frente estaba escrito un nombre, un misterio:
"Babilonia la grande, madre de las rameras y de las abominaciones de la
tierra." 6 Vi a la mujer embriagada con la sangre de los
santos, y con la sangre de los mártires de Jesús. Al verla, quedé asombrado con
gran asombro. 7 Y el ángel me dijo: "¿Por qué estás asombrado?
Yo te explicaré el misterio de la mujer y de la bestia que la lleva y que tiene
siete cabezas y diez cuernos. 8 La bestia que has visto era, y no
es, y ha de subir del abismo, y va a la perdición. Los habitantes de la tierra,
cuyos nombres no están inscritos en el libro de la vida desde la fundación del
mundo, se maravillarán cuando vean a la bestia que era y no es y será. 9 Aquí
está la mente que tiene sabiduría: Las siete cabezas son siete montes sobre los
cuales está sentada la mujer. 10 Y son siete reyes: Cinco han caído,
uno es, y otro aún no ha venido; y cuando venga, debe quedar sólo por un breve
tiempo. 11 La bestia que era y no es, también es el octavo, y
procede de los siete y va a la perdición. 12 Los diez cuernos que
has visto son diez reyes que todavía no han recibido reino, pero toman
autoridad por una hora como reyes junto con la bestia. 13 Estos
tienen un solo propósito, y entregan su poder y autoridad a la bestia. 14 Ellos
harán guerra contra el Cordero, y el Cordero los vencerá, porque él es Señor de
señores y Rey de reyes, y los que están con él son llamados y elegidos y
fieles.”… (Se hace una pausa para reflexionar).
(Apocalipsis 19:10-13) …“10 Yo me postré ante
sus pies para adorarle, pero él me dijo: "¡Mira, no lo hagas! Yo soy
consiervo tuyo y de tus hermanos que tienen el testimonio de Jesús. ¡Adora a
Dios! Pues el testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía." 11 Vi
el cielo abierto, y he aquí un caballo blanco, y el que lo montaba se llama
Fiel y Verdadero. Y con justicia él juzga y hace guerra. 12 Sus ojos
son como llama de fuego. En su cabeza tiene muchas diademas, y tiene un nombre
escrito que nadie conoce sino él mismo. 13 Está vestido de una
vestidura teñida en sangre, y su nombre es llamado EL VERBO DE DIOS.”… (Se
hace una pausa para reflexionar).
(Apocalipsis 19:19-20:15) …“19 Y vi a la bestia
y a los reyes de la tierra y a sus ejércitos, congregados para hacer la guerra
contra el que estaba montado sobre el caballo y contra su ejército. 20 Y
la bestia fue tomada prisionera, junto con el falso profeta que había hecho
delante de ella las señales con que había engañado a los que recibieron la
marca de la bestia y adoraban a su imagen. Ambos fueron lanzados vivos al lago
de fuego ardiendo con azufre. 21 Los demás fueron muertos con la
espada que salía de la boca del que estaba sentado sobre el caballo, y todas
las aves se hartaron de la carne de ellos. Vi a un ángel que descendía del
cielo y que tenía en su mano la llave del abismo y una gran cadena. 2 El
prendió al dragón, aquella serpiente antigua quien es el diablo y Satanás, y le
ató por mil años. 3 Lo arrojó al abismo y lo cerró, y lo selló sobre
él para que no engañase más a las naciones, hasta que se cumpliesen los mil
años. Después de esto, es necesario que sea desatado por un poco de tiempo. 4
Y vi tronos; y se sentaron sobre ellos, y se les concedió hacer juicio. Y
vi las almas de los degollados por causa del testimonio de Jesús y por la
palabra de Dios. Ellos no habían adorado a la bestia ni a su imagen, ni tampoco
recibieron su marca en sus frentes ni en sus manos. Ellos volvieron a vivir y
reinaron con Cristo por mil años. 5 Pero los demás muertos no
volvieron a vivir, sino hasta que se cumplieran los mil años. Esta es la
primera resurrección. 6 Bienaventurado y santo el que tiene parte en
la primera resurrección. Sobre éstos la segunda muerte no tiene ningún poder;
sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él por los mil
años. 7 Cuando se cumplan los mil años, Satanás será soltado de su
prisión 8 y saldrá para engañar a las naciones que están sobre los
cuatro puntos cardinales de la tierra, a Gog y a Magog, a fin de congregarlos
para la batalla. El número de ellos es como la arena del mar. 9 Y
subieron sobre lo ancho de la tierra y rodearon el campamento de los santos y
la ciudad amada, y descendió fuego del cielo y los devoró. 10 Y el
diablo que los engañaba fue lanzado al lago de fuego y azufre, donde también
están la bestia y el falso profeta, y serán atormentados día y noche por los
siglos de los siglos. 11 Vi un gran trono blanco y al que estaba
sentado sobre él, de cuya presencia huyeron la tierra y el cielo, y ningún
lugar fue hallado para ellos. 12 Vi también a los muertos, grandes y
pequeños, que estaban de pie delante del trono, y los libros fueron abiertos. Y
otro libro fue abierto, que es el libro de la vida. Y los muertos fueron juzgados
a base de las cosas escritas en los libros, de acuerdo a sus obras. 13 Y
el mar entregó los muertos que estaban en él, y la Muerte y el Hades
entregaron los muertos que estaban en ellos; y fueron juzgados, cada uno según
sus obras. 14 Y la
Muerte y el Hades fueron lanzados al lago de fuego. Esta es
la muerte segunda, el lago de fuego. 15 Y el que no fue hallado
inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego.”… (Se
da un minuto de silencio para reflexionar). (†).
Diácono: hermano, nosotros tus hermanos te hemos
identificado como una persona que puede dar
el ejemplo, es por ello que te encomendamos a los Santos Apóstoles: Santiago el menor y Tadeo. Esperamos que ellos te sirvan de
ejemplo en esta nueva etapa de tu vida, comprende de Santiago el menor el Deseo y comprende de Tadeo la Conciencia. Hermanos todos, oremos juntos y en
silencio para que estos Santos Apóstoles guíen los pasos de nuestro hermano
XXXXXX. (Todos los hermanos oran el padre nuestro en silencio). (†)
Diácono: hermano mío, para que incrementes tu Prudencia escucha estas sagradas
palabras:
(Apocalipsis
21): …“Vi
un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra
pasaron, y el mar ya no existe más. 2 Y yo vi la santa ciudad, la
nueva Jerusalén que descendía del cielo de parte de Dios, preparada como una
novia adornada para su esposo. 3 Oí una gran voz que procedía del
trono diciendo: "He aquí el tabernáculo de Dios está con los hombres, y él
habitará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con ellos como
su Dios. 4 Y Dios enjugará toda lágrima de los ojos de ellos. No
habrá más muerte, ni habrá más llanto, ni clamor, ni dolor; porque las primeras
cosas ya pasaron." 5 El que estaba sentado en el trono dijo:
"He aquí yo hago nuevas todas las cosas." Y dijo: "Escribe,
porque estas palabras son fieles y verdaderas." 6 Me dijo
también: "¡Está hecho! Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el
fin. Al que tenga sed, yo le daré gratuitamente de la fuente de agua de vida. 7
El que venza heredará estas cosas; y yo seré su Dios, y él será mi hijo. 8
Pero, para los cobardes e incrédulos, para los abominables y homicidas,
para los fornicarios y hechiceros, para los idólatras y todos los mentirosos,
su herencia será el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte
segunda." 9 Vino uno de los siete ángeles que tenían las siete
copas llenas de las siete últimas plagas, y habló conmigo diciendo: "Ven
acá. Yo te mostraré la novia, la esposa del Cordero." 10 Me
llevó en el Espíritu sobre un monte grande y alto, y me mostró la santa ciudad
de Jerusalén, que descendía del cielo de parte de Dios. 11 Tenía la
gloria de Dios, y su resplandor era semejante a la piedra más preciosa, como
piedra de jaspe, resplandeciente como cristal. 12 Tenía un muro
grande y alto. Tenía doce puertas, y a las puertas había doce ángeles, y
nombres inscritos que son los nombres de las doce tribus de los hijos de
Israel. 13 Tres puertas daban al este, tres puertas al norte, tres
puertas al sur y tres puertas al oeste. 14 El muro de la ciudad
tenía doce fundamentos, y sobre ellos los doce nombres de los apóstoles del
Cordero. 15 El que hablaba conmigo tenía una caña de medir, de oro,
para medir la ciudad, sus puertas y su muro. 16 La ciudad está
dispuesta en forma cuadrangular. Su largo es igual a su ancho. El midió la
ciudad con la caña, y tenía 12.000 estadios. El largo, el ancho y el alto son
iguales. 17 Midió su muro, 144 codos según medida de hombre, que es
la del ángel. 18 El material del muro era jaspe, y la ciudad era de
oro puro semejante al vidrio limpio. 19 Los cimientos del muro de la
ciudad estaban adornados con toda piedra preciosa. El primer cimiento era de
jaspe, el segundo de zafiro, el tercero de ágata, el cuarto de esmeralda, 20
el quinto de ónice, el sexto de cornalina, el séptimo de crisólito, el
octavo de berilo, el noveno de topacio, el décimo de crisoprasa, el undécimo de
jacinto, el duodécimo de amatista. 21 Las doce puertas eran doce
perlas; cada puerta fue hecha de una sola perla. La plaza era de oro puro como
vidrio transparente. 22 No vi en ella templo, porque el Señor Dios
Todopoderoso, y el Cordero, es el templo de ella. 23 La ciudad no
tiene necesidad de sol ni de luna, para que resplandezcan en ella; porque la
gloria de Dios la ilumina, y el Cordero es su lámpara. 24 Las
naciones andarán a la luz de ella, y los reyes de la tierra llevan a ella su
gloria. 25 Sus puertas nunca serán cerradas de día, pues allí no
habrá noche. 26 Y llevarán a ella la gloria y la honra de las
naciones. 27 Jamás entrará en ella cosa impura o que hace
abominación y mentira, sino solamente los que están inscritos en el libro de la
vida del Cordero.”…
Diácono: hermano, después de haber sido consagrado con la
orden sacerdotal, te vamos a revelar otros misterios, para que eleves tu
conciencia, tu amor y tu espíritu:
No lloréis por mí, así le dijo Jesús a las mujeres (Se
hace una breve pausa). Nuestro Señor Jesucristo siempre nos guía con su Palabra (Ambos arrodillan ambas piernas
y abren los brazos en forma de "V").
Ieshua esconde el sagrado secreto del noble
Nombre de nuestro señor. (Se hace
una breve pausa). Sin embargo, lo podremos gozar si lo hallamos dentro de
nosotros mismos (Se coloca la mano derecha sobre el corazón).
(Mateo 6:24) …“24 Nadie puede servir a dos señores; porque
aborrecerá al uno y amará al otro, o se dedicará al uno y menospreciará al
otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.”…
Diácono: hermano, escuchad la parábola del señor:
(Lucas 10:25-37) …“25 Y he aquí, cierto maestro de la ley se levantó para probarle, diciendo:
-Maestro, ¿haciendo qué cosa poseeré la vida eterna? 26 Y él le
dijo: -¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo lees? 27 El le respondió
diciendo: -Amarás al Señor tu Dios con
todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu
mente; y a tu prójimo como a ti mismo.
28 Le dijo: -Has respondido bien. Haz esto y vivirás. 29 Pero
él, queriendo justificarse, preguntó a Jesús: -¿Y quién es mi prójimo? 30 Respondiendo
Jesús dijo: -Cierto hombre descendía de Jerusalén a Jericó y cayó en manos de
ladrones, quienes le despojaron de su ropa, le hirieron y se fueron, dejándole
medio muerto. 31 Por casualidad, descendía cierto sacerdote por
aquel camino; y al verle, pasó de largo. 32 De igual manera, un
levita también llegó al lugar; y al ir y verle, pasó de largo. 33 Pero
cierto samaritano, que iba de viaje, llegó cerca de él; y al verle, fue movido
a misericordia. 34 Acercándose a él, vendó sus heridas, echándoles
aceite y vino. Y poniéndole sobre su propia cabalgadura, le llevó a un mesón y
cuidó de él. 35 Al día siguiente, sacó dos denarios y los dio al
mesonero diciéndole: "Cuídamelo, y todo lo que gastes de más, yo te lo
pagaré cuando vuelva." 36 ¿Cuál de estos tres te parece haber
sido el prójimo de aquel que cayó en manos de ladrones? 37 El dijo:
-El que hizo misericordia con él. Entonces Jesús le dijo: -Ve y haz tú lo
mismo.”… (Se da un
tiempo para meditar).
Diácono:
es mediante la Sabiduría que
podremos elevar el espíritu. Resguarda en tu corazón estas palabras, trasciende
el Ego y camina siempre con Prudencia.
Diácono: hermano, de ahora en adelante te exigiremos la
virtud cristiana de la Prudencia, y así
mismo, te pedimos que actúes guiado por la Virtud. Escucha la palabra:
(Apocalipsis 22): …“Después me mostró un río de agua de vida,
resplandeciente como cristal, que fluye del trono de Dios y del Cordero. 2
En medio de la avenida de la ciudad, y a uno y otro lado del río, está el
árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto. Las hojas
del árbol son para la sanidad de las naciones. 3 Ya no habrá más
maldición. Y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le
rendirán culto. 4 Verán su rostro, y su nombre estará en sus
frentes. 5 No habrá más noche, ni tienen necesidad de luz de lámpara,
ni de luz del sol; porque el Señor Dios alumbrará sobre ellos, y reinarán por
los siglos de los siglos. 6 Me dijo además: "Estas palabras son
fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, ha
enviado su ángel para mostrar a sus siervos las cosas que tienen que suceder
pronto. 7 ¡He aquí vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las
palabras de la profecía de este libro." 8 Yo, Juan, soy el que
he oído y visto estas cosas. Cuando las oí y las vi, me postré para adorar ante
los pies del ángel que me las mostraba. 9 Y él me dijo: "¡Mira,
no lo hagas! Pues yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos los profetas y de los
que guardan las palabras de este libro. ¡Adora a Dios!" 10 Y me
dijo: "No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el
tiempo está cerca. 11 El que es injusto, haga injusticia todavía. El
que es impuro, sea impuro todavía. El que es justo, haga justicia todavía, y el
que es santo, santifíquese todavía. 12 He aquí vengo pronto, y mi
recompensa conmigo, para pagar a cada uno según sean sus obras. 13 Yo
soy el Alfa y la Omega,
el primero y el último, el principio y el fin." 14 Bienaventurados
los que lavan sus vestiduras, para que tengan derecho al árbol de la vida y
para que entren en la ciudad por las puertas. 15 Pero afuera
quedarán los perros, los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los
idólatras y todo el que ama y practica la mentira. 16 "Yo,
Jesús, he enviado a mi ángel para daros testimonio de estas cosas para las
iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de
la mañana." 17 El Espíritu y la esposa dicen: "¡Ven!"
El que oye diga: "¡Ven!" El que tiene sed, venga. El que quiere, tome
del agua de vida gratuitamente. 18 Yo advierto a todo el que oye las
palabras de la profecía de este libro: Si alguno añade a estas cosas, Dios le
añadirá las plagas que están escritas en este libro; 19 y si alguno
quita de las palabras del libro de esta profecía, Dios le quitará su parte del
árbol de la vida y de la santa ciudad, de los cuales se ha escrito en este
libro. 20 El que da testimonio de estas cosas dice: "¡Sí, vengo
pronto!" ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús! 21 La gracia de nuestro
Señor Jesús sea con todos.”…
Diácono: hermano mío, antes de concluir este acto te daremos
a escoger un nombre que represente una función sacra, elige bien tu nombre y de
ahora en adelante dedica tu vida a ese nombre (Se le vuelve a dar la piedrecita
blanca y se da un lapso de tiempo prudencial o se deja otro día para la
selección de dicho nombre y meditarlo, este debe “tallarlo” en la piedrecita
blanca). Nosotros de ahora en adelante te reconoceremos como: XXXXX. (Todos
dicen AMéN).
Diácono: hermano mío, ya han pasado nueve (9) años de la luz, que Dios bendiga tus
palabras. Hermanos todos, cerremos este hermoso sacramento del Espíritu como nuestro Señor Jesucristo
nos reveló. (Se reza el Padre Nuestro). (†).
Cuadro 5: Transfiguración de Jesús.
Ejercicios
espirituales: para este sacramento se recomienda
que el hermano evalúe muy bien sus sentimientos, así como el dominio de las
emociones. Para ello, se recomienda la práctica del servicio y reflexionar
profundamente sobre sus intenciones en cada momento con cada persona, además de
amar al prójimo como a sí mismo, poder perdonar y poner la otra mejilla. En la
meditación ya debe exaltar su templo sagrado, consiguiendo un cielo más
profundo e íntimo, además ya debe dominar su mente, se recomienda que
reflexione sobre Jesucristo y la vibración del espíritu.